a veces cuando hay rocio, no hace falta llorar...
a veces cuando tomas agua, no hace falta llorar...
a veces cuando se extraña, tampoco hace falta llorar.
de pronto llueve, me da frio salir de la cama y estoy sola
me pongo las botas de lluvia y salgo a caminar.
a veces encuentro un charco y no hace falta ver un reflejo...
a veces encuentro un arbol y no hace falta que tenga hojas...
a veces encuentro un corazon y no hace falta morir de amor.
de pronto llueve, me da paz mirar la ventana y estoy sola
me pongo a cocinar y te espero.
muy despacito
Un fiel espíritu del silencio, salva mi piel.
Sin tiempo, como el arte en el monte, entre ojos del hombre y una niña jugando a ser india sacude su corazón.
Partes de un ayer, nostalgias de hoy... recuerdo que le rogué a la paz que cuando llegue a la ciudad me despierte la libertad... NECESITO RECUERDOS ENTONCES...
el ácido en un ojo, fijate en los detalles.
y siempre tengo presente, casi a punto de vencerme, casi a punto de morir... casi a punto de morir de risa, casi a punto de ir sola.
Quise compartir, quise compañia... quise, en algo me equivoque.
ananezco dia a dia, nuevamente, para seguir jugando.
el dejar el hogar de la infancia, igual voy a correr a tu pecho mamá... me da miedo ser mujer! pero sé que ya lo soy, que quiza a mi me llamen mamá.
tu fiel espiritu... escucha! puedo volver a querer compañia, pero de esa que nos hace ser feliz, no de la que me hace verme mala.
LaVaga
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